Pasión y sueños de un berissense en Qatar
Se fue con el hermano a cumplirle una promesa a su corazón. Agustín Leguiza, un delantero que pasó por Gimnasia hasta la reserva, y defendió con orgullo las dos camisetas de los clubes de su ciudad, Estrella de Berisso y Villa San Carlos. Hoy quiere repetir el grito sublime de un gol, y está confiado “porque este equipo no te va a dejar tirado”. Agustín llevó su bandera también, la que lleva el escudo blanco y negro de las Cebras. Ahí estuvo en la parte alta de una tribuna de plateas ubicada detrás de uno de los arcos. “A Messi lo vi jugar en River, pero acá es distingo, lo veo deslizarse cuando la agarra… Y qué decir de un Enzo Fernández, que la para y levanta la cabeza como en el potrero, pero quién lo puede hacer en un Mundial?”.
El fanático empezó por elogiar a esos que en la sangre llevan el gol, como él mismo lo hizo en su mundo amateur y un breve paso por el profesionalismo cuando San Carlos jugó el Nacional B en 2013. Parece que esta Selección le está mostrando el mismo fútbol que vivió él que se acostumbró a jugársela con amigos. Y dedicó un párrafo a los que más usan el pico y la pala para defender: “Me impactó Lisandro Martinez, al que veo en Manchester y la gente le grita ‘argentino, Carnicero!’, porque te traba con la cabeza y verlo en vivo es impresionante”.
Los Leguiza, una familia entera forjada en el trabajo y crecida dentro de un pueblo de cepa inmigrante como Berisso, llora de emoción al mostrarse las fotos, donde los hijos andan entre jeques. “Uno bajó para pedirme una foto. Están fascinados con esta hinchada. Andan en sus super camionetas con canciones de Argentina. Hasta los custodios del hotel también escuchan nuestras canciones”, relata Agustín que no deja de pensar en un país grande, pero aprovechando los otros recursos más que los deportivos. “Mirá si fuéramos así en otros órdenes”, sueña. Como sueña con otra fiesta para hoy. El joven contiene las lágrimas y desde Qatar manda otro audio con sus horarios cambiados. Pícaro y hábil extremo derecho, de esos que buscan ganar en velocidad, el crack de la Liga Amateur se siente feliz y hasta realizado con su arribo a la Copa. Dice que cuando llegó el 2 a 2 de los holandeses nunca dudó en que el grupo de Scaloni lo ganaría, aunque no sabía cómo “pero tenía la seguridad”. Respecto al arquero, remató con otra frase que pinta lo que sentimos todos de este lado del mundo: “Dibu lleva una euforia por la victoria que pareciera tener al diablo en el cuerpo”.
La canción que más se escucha en Qatar y que los hermanos Leguiza y todo albiceleste ensaya desde subieron al avión… “En Argentina nací… tierra de Diego y Lionel… de los pibes de Malvinas que jamás olvidaré…” El fueguito ya está encendido. A unas pocas horas de la semifinal, con la camiseta de Estrella y con el fueguito encendido para comer algo rico, solo queda esperar las imágenes y ver que así como los Leguiza hay un país que espera otra alegría.