La bandera de Gimnasia fue uruguaya
Antes y después del partido hablé con dos próceres de la ciudad. Primero, Ignomiriello, a los 95 pirulines, que tenía 23 años cuando sacó campeón a la Tercera de Gimnasia… años en que la figura del DT no era tan mediática. “Conductor técnico docente”, así se describió Miguel, que dicho sea de paso quedó como el único título de los mens sana desde que en AFA se juegan preliminares.
Va a empezar el partido y apenas queda un poco de claridad en el cielo frío del Bosque. Qué grande y bello el paisaje si lo vemos desde el más allá…
A los 7 minutos ya hace calor en las populares, cuando Eric Ramírez mete el 1-0 y sale corriendo como aquellos pibes que sacaban la sortija de la pera, en las calesitas que alguna vez existieron en el Paseo del Bosque (ya casi no quedan calesitas en toda la ciudad).
A los 23 minutos ya entrada la noche y con Enzo Copetti como un loco suelto, corre y define para el empate y celebra haciendo señales, como si fuera “acá, yo, el dueño de las tierras”.
En las plateas todavía se hablaba del Loteo de Estancia Chica, la presentación del sábado y la presencia del “Chiqui” Tapia, el caporale de la AFA. Una anécdota del gremialista del fútbol, Sergio Marchi (ex defensor de GELP, 1981-1984) que viendo la presencia de Coco Sánchez (ex Presi de GELP 1980-1983) micrófono en mano y delante de toda la concurrencia se sinceró con una humorada por el penal que pudo cambiar una historia. “Usted no fue famoso por culpa mía, ibamos a ascender y yo patié el penal a cualquier parte”.
Volvamos al aquí y al ahora. Estallan las gargantas porque precisamente un penal a favor de Gimnasia lo mete con el alma Brahian Aleman, uruguayo que anda afilado y transfiere el scorer al 2-1.
Segundo tiempo, un poco de Radio Universidad. Mariano Crespo en los comentarios advierte que “hablando en términos boxísticos Racing ocupa el centro del ring, pero Gimnasia espera, sin problemas”. El relator Damián Zárate retoca la apreciación anterior: “Y Racing tiene mandíbula de cristal, le llegan poco y le meten mucho”.
El partido está menos dinámico, pero los sustos lo mantienen entretenido. Copetti le ganó la posición a los dos centrales y se pierde el empate (recordé el programa social “Racing Solidario”, por la gentileza del 9 Académico). También pienso en la fortuna que tuvieron los defensores albiazules porque no se cambió en el vestuario visitante Carlitos Alcaraz, el morochito de pique infernal, surgido de Curuzú Cuatiá y del DIVE, equipos arrabaleros de Villa Elisa.
Los últimos 30 minutos se van a jugar sin el VAR. El colmo es que se el Sistema sufrió una interrupción. Y sobreviene una polémica, donde La Academia reclama penal (de Piris contra ese inquieto de Copetti), pero no se puede chequear. Cuando se presentó este “invento” se aclaró que “en caso de que se cortara la conexión con las cabinas ubicadas en el complejo Julio Grondona el partido debía continuar y que el referí debería advertir a los capitanes que el partido seguiría sin la prueba de video”.
Cinco minutos después, a los 20 del ST, un golazo de Aleman termina de derrumbar a los racinguitas (de rayas celestes y azules). Le dio con cara interna del botín zurdo, “máxima pureza el disparo y al ángulo derecho de Chila Gomez, que estirando su metro 70 centímetros no puede llegar”, grita Zárate desde la cabina. El 3-1, en el arco de la Facultad, fue una clase de cómo pegarle a una pelota parada. Por algo tiene al maestro inspirador de Gorosito. Papeles en mano, hace 25 años el “Pipo” era citado a un tercer ciclo de la Selección. “Antes (con Bilardo y Basile) sentía que estaba de paso, que alquilaba un lugar porque la 10 tenía dueño (Maradona), ahora sé que tengo un rendimiento aplomado y puedo comprar el puesto”, jugaba en una declaración en aquel año 1997 el actual DT tripero, que recién volvía de Japón para jugar en el Ciclón.
Pipo, a sus 32 años, observado por el DT Passarella. El actual DT fue convocado en tres ciclos distintos
Insaciable se volvió el Lobo, que metió el cuarto, pero a los 32 minutos todos gritan y luego de unos cuantos minutos de suspenso confirman por el VAR “una mano del autor del gol, Ramírez”. Cabe aclarar que el VAR había recuperado la transmisión y que antes de invalidar el tanto ya Gorosito había metido dos cambios, sacando a los goleadores Ramírez y Aleman. Pero el resultado volvía a estar 3-1 y habría que ver si el responsable táctico querría sacarlos cuando la ventaja volvía a ser de dos goles.
El final llegó entre canciones y fanáticos estoicos en la suya, el aliento. Mi cabecita que sabe ser memoriosa me remonta a la final de ida en Avellaneda, torneo Octogonal de Primera B 1984 (por el segundo ascenso), aquel Racing 1 Gimnasia 3, con la misma progresión del marcador, 1-0 GELP con grito de Angel Ismael Flores, la igualdad de Racing, el 2-1 por un penal que mete Kuzemka (también a los 40 minutos exactos del primer tiempo, como este de Aleman) y el remate 3-1 en el segundo acto, con golazo de Carrió, para estar tranquilos, preparando la caravana hacia la A luego de 5 años.
Pocas veces jugó Gimnasia un 20 de junio, día de la Bandera. Muchos partidos fueron en la década del 40, donde en 1948, en el Bosque, superaba 3-1 a Huracán, con doblete de Walter y uno de Heredia. Y contra otro grande hubo una visita de Boca en 1965, que terminó 1-1 con tantos de Guagliardi para el tripa y del “Loco” Orestes Corbatta para la visita.
En la camiseta estuvo bien bordada la insignia patria, aunque bien podría añadirse un poquito de la hermosa bandera uruguaya por los goles y el tremendo momento personal de Aleman.
A seguir mirando el futuro, porque en cuatro días se juega ante Rosario Central, viernes a las 19 horas.
Por Gabriel “Colo” López